El panorama de la construcción de edificios sustentables en México

31 Oct 2016

07:00 Hrs

La arquitectura sustentable, también denominada arquitectura sostenible, arquitectura verde, eco-arquitectura y arquitectura ambientalmente consciente, es la planeación de edificios que generen la energía que pueden consumir, es decir, que con tecnología y materiales adecuados se optimicen los recursos naturales disponibles y sean edificios sustentables energéticamente.

El costo de un edificio sustentable en algunos casos, no implica más que un incremento del 5% del valor, pero significa ahorrar en gastos de operación hasta un 30%. El diseño lo es todo y los materiales deben cumplir con una responsabilidad esencial, desde los clavos hasta el concreto, vidrios fotovoltaicos, paneles solares y el agua empleada para los sistemas de calefacción o enfriamiento de los edificios.

Debemos recordar que la iluminación es esencial y se debe cuidar el aprovechamiento de la luz natural para el ahorro energético y reducir las emisiones contaminantes al ambiente. El diseño de los edificios sustentables debe hacerse pensando en los problemas que enfrentan y enfrentarán los países, mínimo en los próximos 40 años; principalmente cuidando el ámbito energético y de cambio climático.

A nivel mundial y desde 1998 existe un organismo certificador que avala la construcción sustentable: el certificado LEED (por sus siglas en inglés, Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental) del Consejo de Edificación Verde de Estados Unidos (US Green Building Council).

En México hay 230 edificios que cuentan con la certificación LEED y 223 inmuebles que se encuentran en proceso de certificación ante el Consejo de Edificación Verde. Aunque, también hay otras instituciones que certifican estas prácticas como Energy Star y Buildings Own & Management Association. En México se cuenta con la Ley de Construcción y Medio Ambiente y aún existe el reto para crear una certificación mexicana para edificios sustentables.

En la Ciudad de México se tiene el Programa de Certificación de Edificaciones Sustentables (PCES), por parte del Gobierno local cuyo objetivo es calificar, certificar e implementar medidas de sustentabilidad en los edificios, tanto habitacionales como comerciales, y así ofrecer incentivos, descuentos, licencias y financiamientos.

A continuación mencionaremos algunos de los edificios sustentables y construcciones ecológicas más innovadoras en nuestro país:

Las oficinas corporativas de AXA Seguros son un ejemplo de tecnología de vanguardia en cuestiones de seguridad, sustentabilidad y responsabilidad corporativa. Evalúa aspectos relacionados con eficiencia energética, la calidad ambiental interior, consumo de agua, materiales y ubicación, entre otras cosas.
Bioconstrucción 347, ubicada en Nuevo León, pionera en bioconstrucción y energía alternativa. La construcción reutilizó el 75% de las paredes, pisos, techos y el 50% de los elementos no estructurales interiores, además de funcionar con energía solar y eólica.
La terraza verde habitable más grande de Latinoamérica, que pertenece al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (INFONAVIT). Inaugurada en 2010, posee un huerto de cultivo con diversos tipos de hierbas y verduras para ser consumidas por los mismos trabajadores. Los desechos orgánicos son depositados en una lombricomposta que produce humus para ser usado como composta. El lugar cuenta también con paneles solares para calentar el agua de las duchas.
Torre Vistral se localiza en el la CDMX y destaca por su impresionante vista y su certificación LEED oro. Es un edificio all-inclusive que también tiene espacio para oficinas virtuales, incrementando la eficiencia energética, además de ahorrar 5,700 galones de agua potable al año.
La Secundaria Técnica número 120, ubicada en el kilómetro 39 de la carretera federal México-Cuernavaca, reconocida por sus esfuerzos para ser un plantel completamente sustentable, ganadora de tres premios locales, uno nacional y uno mundial. Tiene en operación un sistema de captación de agua pluvial, genera energía a través del sol, cuenta con un invernadero para hortalizas y otro más para el cultivo de hongos. Y tiene un proyecto para crear un biodigestor que producirá biogás y biol o abono biológico.
La adaptación sustentable del Antiguo Palacio Virreinal. Fue modificado para poder gestionar residuos, le incorporaron elevadores energéticamente eficientes y un alfombrado antimicrobios para incrementar la calidad del aire dentro del recinto.
La Universidad del Arte en Puebla, que fue construida para restaurar la topografía de la zona. El edificio ha incluido la vegetación del lugar para su decoración, promueve la iluminación y ventilación natural debido a su estructura y tiene un sistema de filtración pluvial que permite reutilizar el 100% de la lluvia.
El edificio Ciinova en Querétaro es una incubadora de empresas y proyectos de innovación y sustentabilidad. Tiene un certificado LEED platino y puede ahorrar 122,820 galones de agua al año gracias a la implementación de plantas que reducen la necesidad de riego, además de permitir ahorrar un 56% de consumo de energía.
Centro Centrex L’Oréal, un complejo de distribución sostenible de 6,503.2 m2 construido en San Martín Obispo en el estado de México. Cuenta con sistemas para reducir el consumo de agua, los materiales usados son duraderos y además el gasto en iluminación es reducido.
La Torre HSBC, ubicada en el Paseo de la Reforma, en la Ciudad de México, es la primera de su tipo en edificios amigables con el medio ambiente en México y en América Latina. Está diseñada para operar con un consumo mínimo de agua y se recicla en todos los servicios posibles. El consumo de energía eléctrica, las emisiones de dióxido de carbono y los residuos también están controlados.
EcoLogistics 1 de Hines es un edificio localizado en el Parque Logístico de la zona industrial de San Luis Potosí, cuenta con aparcamiento de bicicletas y vestidores; el estacionamiento, preferencial para vehículos de bajo consumo, utiliza pavimento de rejilla abierta; además, los constructores usaron materiales adhesivos, pinturas y selladores de baja emisión. Reduce un 20% el uso de agua potable y un 19% de costos de energía debido al sistema integrado de sensores de luz diurna.
El Edificio Dos Patios de la empresa Siemens de México incluye un sistema antisismos de placas transversales que minimizan el impacto de los movimientos telúricos, la iluminación se produce por focos LED que disminuyen un 30% el consumo de energía eléctrica y además, implementa un sistema de tratamiento de aguas residuales para reducir un 20% su utilización.
La planta Beiersdorf en Guanajuato que cuenta con una certificación LEED platino por el reciclaje del 33% de sus materiales de construcción y la capacidad de reducir el 62% del coste energético y el 40% del uso del agua, al igual que por el desvío del 95% de sus residuos sanitarios.
El edificio de la delegación Azcapotzalco es el primer edificio público 100% sustentable que produce su propia energía eléctrica. Contó con una inversión de MXN $4,700,000 en 240 paneles solares, 654 lámparas y 129 sensores de movimiento.
El Tubohotel, ubicado en Tepoztlán, está compuesto por módulos de tubos reciclados de hormigón. En cada uno hay una habitación térmica y minimalista. También ofrece cocina, cuartos de baño y duchas privadas con sistemas economizadores de agua, y se encuentra instalado dentro de una huerta orgánica.
La Biblioteca Vasconcelos es un lugar donde además de libros, se brindan actividades culturales gratuitas, y donde se aprovecha al máximo la iluminación y la ventilación natural gracias a sus grandes ventanales. Contiene un jardín botánico que funciona como un respiradero en el centro de la ciudad de México debido a sus 60,000 ejemplares de 168 especies de árboles, arbustos y plantas herbáceas.
Container City, un ciudad dentro de Puebla, construida a partir de contenedores marítimos reciclados e instalaciones hechas con materiales reutilizados.

La creación de edificios sustentables, es un claro ejemplo de que se puede ir hacia el futuro y que la sostenibilidad empresarial está a la alza al ser oficinas de gobierno, bibliotecas, escuelas y zonas de trabajo las que comienzan a reparar el daño ambiental y a contribuir con las comunidades cercanas y sus empleados a desarrollarse.